26 jun 2008

Más Tashkent

Como había decidido extender la visa de Uzbekistán por una semana, me dirigí al OVIR que es la oficina de registro de la policía en Tashkent. Un caos impresionante y un policía muy borde que no hablaba una palabra de inglés, menos mal que había un coreano- uzbeko que me echó una mano a lo cual el servidor de la ley y el orden le dijo que me pidiera dinero a cambio de ayudarme. Al final tuve que ir al aeropuerto donde hay una oficina más tranquila en la que por un dineral te arreglan la visa por una semana. La sensación de haber estado atrapado por la burocracia de estos países es tremenda, horas metido en despachos, colas interminables, formularios, entrevistas…
El sábado por la noche tocaba partido de España, otra vez nos fuimos con unas cuantas amigas uzbekas (que saben hablar muy bien español). Allí plantamos un cartel de España al lado del televisor y al final con el gol en el último minuto acabamos haciendo hasta la conga.
A día siguiente nos fuimos todos a un pantano al que llaman el Mar de Tashkent. La gente viene a darse un chapuzón entre las algas y a olvidarse por unos momentos de los cuarenta grados que estamos sufriendo estos días de verano. Allí cogimos una carraca de patín para darnos un paseo que al final acabo volcando y casi en el fondo de lago. A mitad
de la tarde, entre juegos de cartas, Juanito, como no, sacó su guitarra y se puso a tocar algunos temas y aquello fue todo un espectáculo. En breves momentos tenia como 20 o 30 admiradores que le pedían insistentemente que tocara El Mariachi. Por cierto, he puesto en los vínculos de amigos su espacio por si a alguno le apetece conocer su música.
Gastronómicamente hablando, Uzbekistán es mucho más rico que Irán. La comida nacional por excelencia es el Plov: arroz con cebolla, zanahoria, a veces garbanzos y siempre unos pedacitos de carne de vaca. También es muy socorrido el laghman, una sopa con vegetales, fideos chinos y carne. En todos lados hay puestos de shashlyk, carne o bien picada o bien entera ensartadas en un pincho y acompañadas de cebolla macerada en vinagre.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Biennnnnnnnnnnnnnnnnnnnnn!!!!!!
Estamos en la finallllllllllllll...
Tengo a los vecinos gritando, tirando petardos,...
Por fin.....Nada, celébralo tú también por allí, que ya veo que lo estás pasando en grande...

Gollll, Golllllll, Golllllllllll, tres a cero, ahí es nada...jajajaja.

Besotes enormes.

Lola.

Anónimo dijo...

Espero que en algún lugar de alguno de los chiquitistanes en los que estás haya llegado el eco de la juerga por machacar a los rusos.

Eso que a mi no me gusta el futbol, pero no he visto jugar a ningún equipo en toda mi vida como jugaron los españoles en la segunda parte del partido....Aupa España!!!!!

Bueno, espero que no te pierdas la final, aunque contra los alemanes seguro que toca sufrir....


Un besito de Mamá, que la tengo por aquí al lado, de Loli y, como no, de tu hermano Grego.

Besos.

Anónimo dijo...

Por cierto, a ver si nos cuelgas algunas fotos más, que andamos ávidos de imágenes...

Creo, además que tienes el contador de días de viaje mal o se te ha acortado terriblemente el tiempo...será por la relatividad de Einstein...

Besos.
Grego.

Anónimo dijo...

Hola Gusin...Que alegría me das cuando leo tus comentarios..Me alegra mucho que lo estes pasando tan bien, mezclándote con tanta cultura..Pero ya sabes que te damos un año y no más para que vuelvas por aquí a montar escándalo...
Besitos.
Miriam.